No tomamos en serio la protección del medio ambiente. Naturalista y poeta, dice que todavía no hay conciencia de que es un tema muy urgente

La Nación,
26 November 2008, Argentina

Alfredo Lichter dice que está un poco desencantado: "En 30 años, el movimiento ambientalista no ha logrado cambiar formas de vida ni llegar a la gente. Todavía no tomamos en serio el medio ambiente. Se lo considera un tema de expertos. Pero si la sociedad no incorpora una cultura de protección, los problemas lejanos se terminarán convirtiendo en próximos muy pronto", opina.

Este poeta y naturalista sabe de lo que habla, ya que ha dedicado buena parte de su vida al estudio del mar y a desarrollar mensajes que pusieran de relevancia la necesidad de modificar nuestra relación con la naturaleza.

Lichter tiene 53 años, estudió biología y agronomía, y se ha dedicado durante muchos años al estudio de los mamíferos marinos.

Fue miembro de la delegación argentina ante la Comisión Ballenera Internacional y fue incluido en el Sprit of Enterprise Rolex Award Book (1987) por su proyecto de crear una red sudamericana de avistaje de ballenas francas.

Es autor, entre otras obras, de Huellas en la arena, sombras en el mar (los mamíferos marinos de la Argentina y la Antártida) y coautor de Guía para el reconocimiento de cetáceos del Mar Argentino y de Las ballenas de la Patagonia , que contó con el auspicio de las Naciones Unidas (Pnuma).

En 1994, obtuvo el Premio Fortabat de Poesía.

Actual presidente y fundador del Ecocentro de Puerto Madryn, fue responsable de la idea original de esta fundación y de su desarrollo. Escribió, en colaboración con Santiago Kovadloff, Un manifiesto por la vida del mar .

Carmen María Ramos lo entrevistó para el periódico La Nación. Si está interesado en leer la totalidad de la entrevista, puede visitar www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1074300. En ella, Lichter habla de la necesidad inminente de una política de Estado que proponga alternativas distintas a las que consideran el medio ambiente solamente como objeto de dominio, para que se puedan encontrar soluciones a los problemas ambientales. “No se trata de abandonar las relaciones de trabajo y producción con la naturaleza, pero sí de entender que ella no debe ser materia pasiva de posesión y explotación”. También considera que las ONG deben ser promotoras de cambio y movimientos de conciencia: “La Fundación Ecocentro, constituida en Puerto Madryn, es una voz que propone un profundo cambio cultural, en el que la educación, la poesía, la música, la ciencia, la literatura y el arte abren la puerta hacia lo físico y hacia lo metafísico que tiene el mar”.

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1074300